Todo sobre el cáncer de ovario, uno de los más peligrosos para la salud de la mujer

Todo sobre el cáncer de ovario, uno de los más peligrosos para la salud de la mujer

Para las mujeres es muy importante saber qué es el cáncer de ovario, reconocer los síntomas, entender cómo es un diagnóstico real y, sobre todo, encontrar información de tratamientos y terapias alternativas que les ayudarán en el proceso.

¿Qué es el cáncer de ovario?

Las mujeres tenemos dos ovarios, que son las glándulas en donde se producen los óvulos para la reproducción. Además, son una gran fuente del estrógeno y la progesterona (las hormonas femeninas).

Los óvulos viajan a través de las trompas de Falopio hacia el útero donde el óvulo fertilizado se implanta y se desarrolla en un feto. Los ovarios están ubicado en los extremos del útero en la pelvis.

El cáncer de ovario surge cuando las células de esta parte del cuerpo (o de las trompas de falopio) comienzan a crecer en forma descontrolada y sufren una transformación maligna. Este es el tumor ginecológico de mayor riesgo.

Los ovarios están compuestos por tres tipos principales de células de donde derivarán los diferentes tipos de cáncer:

  • Células epiteliales: cubren la superficie externa del ovario.
  • Células germinales: se originan de las células que producen los óvulos.
  • Células estromales: componen el tejido estructural que sostienen el ovario y producen las hormonas femeninas estrógeno y progesterona.

¿Cómo reconocer los síntomas del cáncer de ovario?

El cáncer de ovario temprano no presenta síntomas; ocasionalmente, y de manera inadvertida, puede encontrarse una masa anexial, a menudo sólida, irregular y fija.

Una masa anexial es un bulto que se encuentra en el tejido cerca al útero.
Puede formarse en los ovarios, en las trompas de falopio o alrededor.
Usualmente son masas benignas, pero, en ocasiones pueden ser cancerosas.

La sintomatología se presenta en estadios avanzados y se puede confundir con enfermedades del aparato digestivo y la vejiga, por lo cual no es específica ni concluyente. Dentro de los síntomas de cáncer de ovario están:

  • Hinchazón y malestar en la parte inferior del abdomen
  • Mala digestión
  • Ganas de orinar muy frecuente
  • Pérdida de peso injustificada
  • Falta de apetito
  • Alteraciones menstruales
  • Sangrado vaginal (en especial si ya ha pasado la menopausia)
  • Secreción vaginal anormal
  • Dolor de espalda.
  • Estreñimiento.

Si presentas estos síntomas, no te alarmes, pero no dudes en acudir prontamente al médico para que realice un diagnóstico adecuado.

Causas del cáncer de ovario

Aún no se saben las causas exactas del cáncer de ovario, pero sí se conocen algunos factores que aumentan las posibilidades de padecer este tipo de cáncer.

Factores de riesgo del cáncer de ovario

Algunos de los factores que aumentan el riesgo de padecer de cáncer de ovario son:

  • Antecedentes: personales o familiares (como su madre, hermana, tía o abuela) por parte materna o paterna que hayan tenido cáncer de mama, de ovarios o cáncer colorrectal
  • Edad: es más frecuente en mujeres que ya han pasado por la menopausia o mujeres mayores de 40 años
  • Fertilidad: no haber tenido hijos o tenerlos a edades avanzadas
  • Sobrepeso: la obesidad se ha relacionado con un mayor riesgo de padecer muchos cánceres
  • Estrógenos: terapia hormonal después de la menopausia o inductores de la ovulación en procesos de fertilidad
  • No haber tenido hijos o haber tenido problemas para quedar embarazada
  • Tener endometriosis
  • Haber tenido tu primer menstruación de manera tardía, después de los 13 años
  • Uso de talco en la  zona genital: diversas investigaciones han sugerido que el polvo de talco aplicado directamente al área genital o en toallas sanitarias pudiera ser carcinogénico (causante de cáncer) para los ovarios, dado que hay productos de este tipo contaminados con asbesto.
  • Alimentación: una dieta baja en grasas saturadas y con variedad de alimentos saludables, especialmente los de fuente vegetal, mostró un menor riesgo de cáncer de ovario.
  • Otras enfermedades, incluyendo algunos otros tipos de cáncer.

Prevención del cáncer de ovario

No se conoce una forma 100% segura para prevenir ningún tipo de cáncer, sin embargo, escucha tu cuerpo. Consultar a tiempo siempre será la mejor manera de prevención. Puedes tomar ciertas medidas para ayudar a reducir el riesgo de padecer cáncer de ovarios:

  • Mantener un peso saludable
  • No recibir terapia hormonal después de la menopausia
  • Si tienes alta predisposición genética, puedes pedir que te realicen las pruebas para los genes BRCA1 o BRCA2. Si el especialista confirma la predisposición, el cáncer de ovario se puede prevenir mediante la extirpación de los ovarios y las trompas de falopio.
  • Dar lactancia materna. Algunos estudios sugieren que las mujeres que han amamantado a sus hijos durante un año o más podrían tener un riesgo moderadamente reducido de contraer cáncer de ovario.
  • Usar responsablemente los medicamentos hormonales (recetados por médicos) .
  • Alimentarse bien: come al menos 2 ½ tazas de frutas, verduras y vegetales al día, así como varias porciones de alimentos integrales de origen vegetal tales como panes, cereales, granos, arroz, pastas o frijoles. Limita la cantidad de carnes rojas y procesadas (embutidos).

Ciertas circunstancias también reducen el riesgo de cáncer de ovario:

Diagnóstico y exámenes del cáncer de ovario

Si presentas ciertos síntomas que sugieren cáncer ovárico, o si tienes predisposición genética a padecerlo, es necesario realizar pruebas para obtener un diagnóstico adecuado, como:

  • Exámen médico, pélvico, consulta de antecedentes familiares
    • Examen físico específicamente en abdomen, buscando masas, líquido abdominal
  • Consulta con especialista gineco-obstetra
  • Estudios por imágenes:
    • Ecografía: usa ondas sonoras para crear una imagen en una pantalla de vídeo. Puede ser útil para encontrar un tumor y determinar su posible consistencia (sólido o líquido). Se puede observar la apariencia interna o complejidad
    • Tomografía computarizada: toma varias imágenes de Rayos X y produce imágenes transversales detalladas del cuerpo. No muestra tumores pequeños, pero puede mostrar el compromiso de los demás tejidos
    • Resonancia magnética: muestra en detalle masas más pequeñas y el compromiso de ganglios y otras estructuras cercanas.
    • Radiografía de tórax para buscar metástasis pulmonares
    • Tomografía por emisión de positrones: se administra glucosa (azúcar) radiactiva para determinar si hay cáncer, ya que esta sustancia se concentra en las masas que suelen consumir glucosa a un ritmo mayor que los tejidos normales.
  • Otras pruebas:
    • Laparoscopia: es un procedimiento quirúrgico que permite la visualización de los órganos para ayudar a planear la cirugía u otros tratamientos. También puede ayudar confirmar la etapa y extensión del cáncer.
    • Colonoscopia: se utiliza para búsqueda de cáncer colorrectal que puede ser el tumor primario
    • Biopsia: consiste en examinar una muestra tomada en procedimientos anteriores, para ser visualizada en microscopio y determinar su composición y naturaleza
    • Análisis de sangre: el principal marcador tumoral es el CA125 que será solicitado por tu médico para encaminar el diagnóstico

Tipos de cáncer de ovario

  • Tumores ováricos epiteliales o carcinoma ovárico epitelial: es el más frecuente. Aproximadamente de 85 a 90%. Se clasifica de acuerdo con su similitud con el tejido normal. Suele propagarse primero al revestimiento y a los órganos de la pelvis y el abdomen. Puede producir una acumulación de líquido en la cavidad abdominal (ascitis).
  • Tumores ováricos de células germinales: menos del 2% de los cánceres de ovario son de origen de células germinales. En general, tienen un buen pronóstico
    • Teratoma: son tumores que, por sus características germinales, tienen tejidos de todo tipo de órganos. Son generados por una anomalía en la formación fetal. Este tumor de células germinales tiene una forma benigna llamada teratoma maduro y una forma cancerosa llamada teratoma inmaduro. Los teratomas inmaduros se presentan en niñas y mujeres jóvenes, por lo general menores de 18 años.
    • Disgerminoma: por lo general afecta a mujeres adolescentes o de entre 20 y 29 años de edad. No crece ni se extiende con mucha rapidez.
    • Tumor del seno endodérmico (tumor del saco vitelino) y coriocarcinoma: se originan en la placenta (durante el embarazo), son más comunes que la clase que comienza en el ovario. Los coriocarcinomas placentarios suelen tener una mejor respuesta a la quimioterapia que los coriocarcinomas ováricos.
    • Tumores ováricos estromales: se presentan en mujeres mayores de 50 años, pero alrededor del 5% de los tumores estromales ocurren en las niñas. Generan sangrado vaginal anormal. También pueden causar periodos menstruales y desarrollo de los senos en las niñas antes de la pubertad; en ocasiones raras, pueden producir hormonas masculinas (como la testosterona) por lo cual se detienen los períodos menstruales.

Tratamientos del cáncer de ovario

Este depende de muchos factores. Entre los tratamientos más comunes para el cáncer de ovarios se encuentran:

Cirugía

Consiste en la extirpación del tumor de ovario, ya sea que esté solo en un lado (en cuyo caso se extirpa únicamente el ovario y la Trompa de falopio del lado afectado) o que se encuentre más avanzado (caso en el que se puede retirar hasta el útero por completo y ambos ovarios).

La cirugía es el tratamiento principal para la mayoría de los cánceres de ovario. La extensión y complejidad de la cirugía depende de qué tanto se ha propagado el cáncer y de el estado general de salud.

En los casos de aquellas mujeres en edad fértil que tienen ciertos tipos de tumores y el cáncer se encuentra en la etapa más inicial, puede que sea posible tratar la enfermedad sin extirpar ambos ovarios ni el útero (si el tumor se encuentra en un solo ovario y aun quiere tener hijos se retira solo el ovario que contiene el cáncer y la trompa de Falopio del mismo lado).

Si se extirpan ambos ovarios, el útero, o ambos, no podrá quedar embarazada y, por la acción en la secreción hormonal, entrará en la menopausia. Posiblemente tenga que permanecer hospitalizada por 3 a 7 días después de la cirugía y podrá reanudar sus actividades usuales entre 4 a 6 semanas después.

Radioterapia

La radioterapia no es un tratamiento tan común para el cáncer de ovario. Esta utiliza rayos X o partículas de alta energía para destruir las células cancerosas. El procedimiento es parecido a la radiografía común.

Se pueden realizar dos tipos de procedimientos:

  • Radioterapia con haces externos: se realiza la aplicación de radiación de manera externa como tomando una radiografía normal,  los tratamientos se administran 5 días a la semana por varias semanas, cada sesión dura pocos minutos. Puedes tener cambios en la piel, cansancio, náuseas y vómitos, diarrea o irritación vaginal.
  • Fósforo radiactivo: se administra una solución de fósforo radioactivo en el abdomen, que llega hasta las células cancerosas y las destruye. Puede causar deformidad del intestino y alteraciones digestivas (diarrea, vómito o estreñimiento, incluso obstrucción intestinal).

Quimioterapia

Consiste en la inyección una combinación de dos o más medicamentos, administrados por vía intravenosa, cada tres a cuatro semanas. Estos medicamentos alcanzan todo el cuerpo y atacan las células cancerosas.

La combinación de medicamentos parece ser más eficaz en el tratamiento inicial del cáncer de ovario que administrar sólo un medicamento. Se puede usar antes de la cirugía para reducir el tamaño del tumor, o después para eliminar cantidades pequeñas de células cancerosas.

Para el cáncer epitelial de ovario usualmente se usan de tres a seis ciclos, que varían según los distintos medicamentos. El médico debe informar el programa que ha planeado para la quimioterapia.

La mayoría de los efectos secundarios desaparecen una vez se detiene el tratamiento.

Terapia hormonal  

Consiste en el uso de hormonas o medicamentos que evitan que se estimule el crecimiento de las células cancerosas. Se usa en pocas ocasiones para tratar el cáncer epitelial de los ovarios, pero se usa con más frecuencia para tratar los tumores estromales de ovario.

Para la terapia hormonal en el tratamiento del cáncer de ovario se utilizan:

  • Agonistas de la hormona liberadora de hormona luteinizante (LHRH):

“Apagan” la producción de estrógeno por los ovarios. Entre estos se incluye la Goserelina (Zoladex) y la leuprolida (Lupron). Estos medicamentos son inyectados cada 1 a 3 meses. Los efectos secundarios son similares a los de la menopausia y su uso prolongado puede conducir a osteoporosis.

  • Tamoxifeno:

Se puede usar para tratar tumores estromales de ovario y se usa en pocas ocasiones para tratar el cáncer epitelial de ovario avanzado. La idea es evitar que cualquier estrógeno que esté en el cuerpo estimule el crecimiento de las células cancerosas. No causa alteración de los huesos, pero puede aumentar el riesgo de coágulos sanguíneos en las piernas.

  • Inhibidores de la aromatasa:

No detienen la producción de estrógeno en los ovarios, por lo que sólo son eficaces en reducir los niveles de estrógeno en mujeres que han pasado por la menopausia. Se toma una tableta una vez al día. Genera síntomas menopáusicos y osteoporosis.

Terapia dirigida

En este tratamiento, se usan medicamentos u otras sustancias para identificar y atacar células cancerosas específicas sin dañar las células normales. Los más usados son olaparib (se toma oralmente, una vez al día) y bevacizumab (encoge o disminuye el crecimiento de los cánceres ováricos epiteliales en etapa avanzada, se administra intravenoso cada 2-3 semanas).

Cuidados posteriores al tratamiento del cáncer de ovario

Es muy importante el seguimiento posterior al tratamiento. Se realizará control de todos los exámenes tanto de imagen como de laboratorio especialmente el CA125 para el cáncer epitelial de los ovario, además se encaminará el seguimiento en tratar los posibles efectos secundarios que hayas percibido con el manejo.

Para las mujeres con tumores de células germinales se hacen pruebas sanguíneas para detectar la alfafetoproteína (AFP) y/o la gonadotropina coriónica humana (HCG).

Algunas veces resulta útil verificar los niveles de hormonas, como estrógeno, testosterona e inhibina, para las mujeres con cánceres estromales.

Tratamientos complementarios para el cáncer de ovario

Estas son terapias que van de la mano de los tratamientos convencionales.

Inmunoterapia

Es una terapia, hasta ahora experimental, en donde se usan medicinas que estimulan el propio sistema inmunitario del paciente, para que sea capaz de reconocer y destruir las células cancerosas de una manera eficaz.

En estudios se busca crear vacunas antitumorales que dan información al cuerpo para que puedan reconocer más rápido y de manera más eficiente las células cancerosas; además, se están creando anticuerpos monoclonales para reconocer de manera específica las células del ovario y destruirlas.

Un ejemplo es el farletuzumab, que es un anticuerpo monoclonal que se dirige contra el receptor de ácido fólico, el cual se encuentra en la superficie de algunas células cancerosas de ovario. En un futuro, podría usarse para el manejo del cáncer de ovario.

Otro compuesto estudiado es catumaxomab el cual se une a una proteína que se encuentra en algunas células cancerosas y algunas células del sistema inmunológico. Se administra en la cavidad abdominal y puede disminuir el líquido abdominal generado por el cáncer

Hábitos

Mantener unos hábitos saludables es indispensable para controlar cualquier enfermedad:

Dieta

Adopta una dieta balanceada. Come al menos 2 ½ tazas de frutas, verduras y vegetales al día, así como varias porciones de alimentos integrales de origen vegetal tales como panes, cereales, granos, arroz, pastas o frijoles. Limita el consumo de carnes rojas y procesadas (embutidos). Ten en cuenta que se ha encontrado que el pollo y huevo pueden tener hormonas en su sistema para acelerar su crecimiento. Lo mejor es evitar todo tipo de carne.

Es muy importante que, aunque sientas náuseas o que no le sientas buen sabor a la comida, no dejes de comer. La comida es la materia prima para sostener el sistema inmune. En muchos pacientes ha sido útil comer porciones pequeñas cada 2 o 3 horas hasta que se sienta mejor.

Ejercicio

Practicar actividad física es recomendable para el bienestar general de tu organismo, pero es aún más importante cuando te enfrentas el cáncer. Ejercitarte ayudará a que la sangre fluya mucho mejor y tu metabolismo trabaje más eficientemente.

Es necesario generar una rutina de ejercicios adecuada a tus necesidades, habilidades y condición física previa. El ejercicio, a parte de ayudarte con tu salud física, puede generarte un gran apoyo emocional.

Es mucho mejor si te rodeas de otras personas para realizar tus actividades físicas, no solo por el riesgo de caída sino por la necesidad de interacción y apoyo.

Medicina mente-cuerpo

Medita, reflexiona, piensa que tú eres quien mejor te conoce y quien más puede ayudar para curarte. Siente cada parte de tu cuerpo, aprende a entenderte; un poco de autoconocimiento puede ayudarte a entender qué pasa con tu cuerpo y cómo combatir las enfermedades de la mejor manera.

Recuerda que la relación cercana con Dios te dará tranquilidad.

Después de un diagnóstico como este, se generan varios cambios en tu rutina. Es muy importante buscar equilibrio espiritual para poder tomar las decisiones con la suficiente serenidad.

Es fundamental generar pensamientos semilla, estos pensamientos deben ser positivos, en los cuales te presentes de manera receptiva y optimista frente a los tratamientos. Los pensamientos atraen acciones; si atraes cosas buenas, buenas cosas te pasarán.

Cannabis

Los cannabinoides disminuyen el malestar general, ya que contribuyen a la mejoría de náuseas y vómitos, a la estimulación del apetito y al alivio del dolor producido por algunos tratamientos de quimioterapia y radioterapia. Puede potenciar la muerte de las células tumorales, reduciendo su potencial de propagación y metástasis.

Por lo pronto, no se han realizado estudios específicos de la acción del cannabis sobre la progresión del cáncer o su resolución, sin embargo, se han encontrado resultados positivos en procesos neoplásicos de la cavidad abdominal.

Estrategias de afrontamiento y apoyo

Sabemos que un diagnóstico de cáncer puede representar todo un desafío emocional. No te preocupes, es importante que mantengas a tus amigos y familiares cerca y que compartas tus pensamientos y sentimientos con las personas que más amas. Ser escuchado y estar acompañado te ayudará a sentirte más fuerte.

Busca grupos de apoyo de pacientes con diagnóstico similar al tuyo, de esta forma podrán compartir información, resolver dudas y tener un acompañamiento más cercano en cada paso del tratamiento.

¿Quieres saber un poco más sobre cáncer y cómo combatirlo? Aquí estamos para apoyarte y guiarte.

Fuentes:

http://www.fasgo.org.ar/images/Cancer_de_Ovario_Am_Society.pdf

https://journals.lww.com/epidem/Fulltext/2016/05000/The_Association_Between_Talc_Use_and_Ovarian.6.aspx

https://www.cdc.gov/spanish/cancer/ovarian/pdf/ovarian_facts_sp.pdf