¿Se puede aceptar una enfermedad como el alzhéimer?

¿Es posible aceptar las consecuencias del alzheimer?

¿Se puede aceptar una enfermedad como el alzhéimer?

Si hace poco te diagnosticaron alzheimer, seguramente ya sabes qué es y ahora te estás preguntando cuáles las consecuencias del alzheimer.

Aquí te enseñamos algunos consejos que te ayudan a sobrellevar el día a día, a maximizar tu independencia y a vivir plenamente.

Acepta las consecuencias del alzheimer

Las cosas que hacías con mucha facilidad (como mantener un horario o manejar un presupuesto), progresivamente, van a tornarse más y más difíciles. Algunas personas intentan enmascarar estas dificultades para protegerse a sí mismos o a su familia de la vergüenza. O, simplemente, la naturaleza de muchas personas es abstenerse de pedir ayuda.

Intentar cubrir la aparición de los síntomas del alzheimer y fingir que no están ocurriendo cambios que son señales de las primeras etapas del alzheimer puede ser una gran causa de estrés. Es fundamental aceptar que tus habilidades están cambiando y adoptar nuevas estrategias que te permitan enfrentar estos cambios y obtener un nuevo balance en tu vida.

Esto le dará un nuevo sentido a tu vida, que te permite comprender las consecuencias del alzheimer para ti, cómo te afecta y cómo puedes vivir con esta enfermedad.

Sabemos que aceptar los cambios puede ser difícil, pero al hacerlo podrás encontrar formas de:

  • Desarrollar estrategias que te permitan mantenerte activo
  • Responder a los retos del día a día
  • Maximizar tu independencia
  • Mejorar tu bienestar general
  • Ganar un sentido de control sobre tu vida

Ten en cuenta que lo que funciona para una persona, puede que no funcione para otra. Y lo que te sirve un día, al día siguiente puede que ya no funcione. Así que lo mejor que puedes hacer es adoptar flexibilidad y estrategias nuevas que se adapten mejor a ti y a tu día a día.

Entre más flexible mantengas tu actitud, mejores estrategias podrás encontrar para ayudarte a enfrentar cada situación.

Crea tu propia estrategia para enfrentar el alzheimer

Solo tú eres consciente de los cambios a los que tienes que enfrentarte para completar tareas que antes solían ser muy fáciles para ti. Es por esto que la persona idónea para desarrollar una estrategia para enfrentar el alzheimer y crear un tratamiento eres tú mismo.

Desarrollar tu propia estrategia para enfrentar los cambios no tiene por qué ser tan complicado. Puedes simplificar el proceso si te enfocas en estos tres pasos:

Identifica

Haz una lista de las tareas que te cuestan más trabajo.
Si, por ejemplo, puedes ir al trabajo sin problemas, pero se te olvida tomarte tus medicamentos, agrega esto a tu lista. Cada vez que sientas que te cuesta trabajo realizar adecuadamente una tarea, agrégala.

Establece prioridades

Determina qué tan importante es la tarea para ti.
Ordena la lista de acuerdo a lo que consideras más importante. Ten en cuenta también si son cosas con las que tus seres queridos o compañeros te pueden ayudar, o si es algo que definitivamente prefieres hacer solo.
Piensa estratégicamente

Encuentra la solución que mejor se adapta a ti.

Si descubres que te cuesta trabajo cocinar, pero que si pones todo en una olla arrocera puedes hacer comidas fácilmente, no dudes en simplificar el proceso.

Intenta llevar un registro escrito de todas las ideas que se te ocurren para ayudarte a simplificar las tareas diarias. Puedes compartirlo con tus seres queridos para que te ayuden a llevar a cabo las estrategias que vas descubriendo, o para que aporten sus propias ideas.

Acepta la ayuda de los otros

La pérdida de independencia es una de las consecuencias del alzheimer que más causan preocupación para los pacientes en las primeras etapas. Tal vez puedes sentir que cuando pides ayuda, pierdes tu conciencia sobre tí mismo y empiezas a volverte dependiente.

Aunque puede parecer un signo de debilidad al principio, pedir ayuda es necesario. Si tienes ayuda para realizar ciertas tareas, puedes tener más tiempo para realizar otras tareas que prefieres hacer tú mismo. Es decir, aunque suene paradójico, la ayuda es algo que puedes necesitar para mantener tu independencia y permanecer en control.

Consecuencias del alzheimer: Tips para tu día a día como paciente

1. Ponte metas realistas y enfócate en lo que puedes hacer hoy.

Usa las habilidades que tienes para enfrentar los cambios y los retos. Ten en cuenta que algunas tareas pueden tornarse muy difíciles con el paso del tiempo. Aún así, puedes reducir el estrés que esto ocasiona si pides ayuda a tus familiares o amigos.

2. Desarrolla una rutina diaria. Haz un plan diario que te permita controlar lo que quieres hacer durante el día.

Tener un horario o una planeación puede reducir el tiempo que pasas intentando descifrar qué es lo que debes hacer, cuándo o en qué orden. Solo dedícale un tiempo a la organización al inicio del día y podrás realizar satisfactoriamente tus tareas, limitando las fallas y confusiones.

3. Enfócate en una tarea a la vez.

De acuerdo al plan diario, ya tienes una idea de cómo debe ser el orden de las acciones. No intentes hacer dos cosas al mismo tiempo, porque puedes frustrarte y no lograr ninguna de las dos. Mejor dedícale tu atención a una tarea y, cuando la logres, pasa a la siguiente.

4. Reconoce las fuentes de estrés.

Identifica qué es lo que te causa ansiedad, preocupación o estrés. Conocer esto te permite planear adecuadamente tu rutina diaria para saber a qué tienes que dedicarle más tiempo, qué es lo que te debes tomar con más calma y en cuáles actividades quieres participar.

5. Tómate tu tiempo.

Date el tiempo necesario para completar una tarea, no ejerzas presión sobre ti mismo, ni te sientas atascado si no puedes resolver una cosa con la misma agilidad con que la resolvías ayer. Respira, tómate un tiempo e inténtalo de nuevo más tarde.

6. Date más oportunidades.

Ten en cuenta que puede tomarte varios intentos resolver algunos problemas. Es totalmente normal tener que probar diferentes estrategias. Piensa en lo que has hecho, lo que podrías cambiar y los ajustes que puedes implementar.

7. Usa tu fuerza.

Tu fortaleza interna, tu familia, tus amigos, tu fe, tus mascotas y otros. Para cada persona pueden ser distintos. Estos son grandes fuentes de fortaleza que te pueden ayudar a sobrellevar las dificultades y los tiempos difíciles. Mantente en contacto con ellos o, si estás un poco alejado, acércate y verás cómo serán de gran apoyo.

Recuerda que no estás solo. El alzheimer es una enfermedad que afecta a las mujeres y hombres de todo el mundo. Además, cada día se investiga más y se descubren nuevas características que nos pueden guiar hacia un mejor entendimiento. Así que ¡ánimo!, revisa los tratamientos para el alzheimer y comparte esta información que puede ayudar a tu círculo más cercano.

Si quieres saber más tips y estrategias específicas que algunos pacientes de alzheimer han adoptado para sobrellevar las tareas del día a día, puedes conocer cómo se han enfrentado al alzheimer otras personas. ¡Eso ayuda mucho!