10 razones por las que deberías saber más sobre el cannabis (marihuana) medicinal
Para muchas personas, la palabra marihuana todavía genera escalofríos, trayendo a la superficie un universo negativo relacionado con su ilegalidad. ¿Pero ya has pensado que la marihuana, como planta, puede ofrecer más que un simple “viaje”?
Marihuana es el nombre popular que recibió la Cannabis sativa, planta de la familia Cannabaceae. Mucho más allá del uso recreativo por el cual esta planta ha ganado fama en las últimas décadas, el cannabis ha sido usado para muchos otros fines.
El cáñamo es un ejemplo. Desde hace siglos hasta hoy en día, este tipo de cannabis ha sido utilizado por la industria textil, del papel, de la construcción, entre muchas otras.
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Pues si la planta sirve para tantas cosas, puedes preguntarte: ¿de dónde viene la mala fama de la marihuana? Probablemente esa historia nebulosa comenzó en la década de los setenta con la política antidrogas de los Estados Unidos que, entre otras cosas, frenó el desarrollo de investigaciones sobre el potencial terapéutico de sus componentes.
En los últimos años, sin embargo, este escenario ha cambiado a un ritmo acelerado. Diversas investigaciones desarrolladas alrededor del mundo demuestran que los componentes del cannabis no solo pueden ayudar a tratar enfermedades, sino que son más seguros que algunos compuestos usados en la medicina convencional que usa fármacos sintéticos.
Conoce los 10 motivos por los que deberías informarte sobre marihuana medicinal y saca tus propias conclusiones.
1. El cannabis ha sido utilizado desde hace más de 8.000 años
La historia del cannabis se remonta al mundo antiguo. Se cree que ha sido usado por más de 8.000 años. El libro Shu King, de historia clásica China, menciona su uso, a mediados del año 2300 a. C., en el tratamiento de varias enfermedades, de reumatismo a cólicos menstruales.
En 1550 a. C., según papiros egipcios, el cannabis era usado para tratar inflamaciones. La evidencia científica es un poco más reciente: el THC fue encontrado en cenizas datadas de 400 a. C.
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2. La OMS ha reconocido el valor medicinal de la marihuana
La Organización Mundial de la Salud (OMS) admitió que el cannabis tiene amplios beneficios terapéuticos. La organización recomienda que la resina del cannabis (formas más puras) sean retirados de la lista IV de la Convención Única de 1961 sobre Estupefacientes, es decir, sugiere eliminarlos de la lista en la que se encuentran los estupefacientes considerados particularmente peligrosos.
La OMS concluyó que, en estado puro, el cannabidiol (un compuesto del cannabis) no parece ser nocivo ni tener riesgo de abuso.
La planta tiene más de 100 cannabinoides, o ingredientes activos, que se encuentran en mayor o menor proporción, dependiendo de la variedad. Los más comunes son el cannabidiol (CBD) y el tetrahidrocannabinol (THC).
Las recomendaciones específicas de la OMS incluyen medidas de fiscalización aplicables a la producción, fabricación, exportación, importación, distribución, comercio, uso y posesión de productos a base de CBD y THC.
En el caso del CBD, la organización también recomienda que se quiten sus preparaciones de los convenios internacionales de control de sustancias psicoactivas.
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3. Usar productos a base de cannabis no significa que tendrás “viajes alucinógenos”
No hace falta fumar marihuana para obtener los beneficios terapéuticos de esta planta. El uso medicinal del cannabis no tiene nada que ver con el recreativo.
La industria farmacéutica ha desarrollado productos que usan determinados compuestos del cannabis, como CBD y THC, en ciertas concentraciones con fines específicos. En general, estos productos son aceites, cápsulas, gotas, cremas, comestibles o sprays.
La probabilidad de sufrir alucinaciones debido al uso de estos productos es inexistente o muy baja. Realmente, solo medicamentos con altas concentraciones de THC tienen algún potencial alucinógeno. Las concentraciones de este componente son controladas por el médico responsable quien debe alertar sobre la posibilidad de sus efectos colaterales, como las alucinaciones.
Por otro lado, los medicamentos a base de CBD no presentan ningún riesgo de provocar alucinaciones. De la misma manera que el THC, el CBD es un compuesto cuya concentración y presentación debe ser controlada y recomendada por un profesional de la salud especializado, de acuerdo con objetivo buscado.
Es común la combinación de los dos componentes con el objetivo de potenciar sus efectos. Dependiendo de la combinación de concentraciones el médico tratante es quien hace la indicación de manejo.
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4. La probabilidad de desarrollar dependencia a un producto derivado de cannabis es mínima
¿Alguna vez has tenido que tomar un medicamento muy fuerte para el dolor? Si la respuesta es sí, pues, probablemente te has expuesto más al riesgo de dependencia que si hubieras usado un medicamento a base de derivados de cannabis.
Muchos analgésicos para dolores fuertes son elaborados con opioides o opiáceos, que tienen alto potencial de dependencia. Los medicamentos a base de CBD no presentan ningún riesgo de dependencia.
De hecho, solo los medicamentos que incluyen THC tienen alguna probabilidad de provocar dependencia, según la concentración de este componente y sus interacciones con otros.
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5. Productos a base de cannabis ayudan en el tratamiento del cáncer
Los tratamientos con cannabinoides se utilizan para combatir los síntomas que se presentan posteriores a la quimioterapia. No obstante, la investigación médica sigue encontrando relaciones entre los cannabinoides y el cáncer, especialmente buscando relación terapéutica específica para los diferentes tipos de cáncer.
Un estudio de 1996 observó la acción de los cannabinoides en la muerte de células, bloqueo del crecimiento celular y prevención del crecimiento de los vasos sanguíneos que suelen alimentar el cáncer y son necesarios para que el tumor se desarrolle, lo que sugiere que los cannabinoides pueden proteger las células normales y ayudar a eliminar factores que contribuyan al crecimiento de las células cancerígenas.
Otros estudios preclínicos y de laboratorio más recientes llevan a la misma conclusión. Según el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos (NCI), los resultados de laboratorio mostraron que el THC mató o dañó las células de cáncer. Se obtuvo el mismo efecto en pruebas con ratas, en el que el componente actuó positivamente contra el cáncer de pulmón y mama.
De la misma forma, el CBD se ha mostrado ser efectivo en el combate a diferentes tipos de cáncer. Lee más aquí: efectos del CBD en el tratamiento del cáncer.
6. Ayuda a tratar síntomas de enfermedades que afectan las capacidades cognitivas como el alzhéimer y el párkinson
Las dos patologías se están volviendo cada vez comunes y representan un desafío a la medicina. Aunque todavía no se conocen sus causas directas, muchos estudios señalan que el cannabis es efectivo para el control de sus síntomas.
El CBD, por ejemplo, estimula la neurogénesis (la producción de nuevas células), alivia la confusión y la agitación que el alzhéimer puede producir, mejora el humor y el sueño y ayuda a recuperar el apetito.
En el combate a los efectos del párkinson, el CBD disminuye los temblores, promueve la relajación y actúa como antidepresivo (la depresión es uno de los síntomas del párkinson).
La investigación sigue buscando la cura de estas enfermedades y otras que afectan la capacidad cognitiva como la esclerosis múltiple. En el CBD y THC puede estar la clave para mejorar la calidad de vida de quienes padecen esas enfermedades crónicas y degenerativas.
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7. Está comprobada su efectividad contra algunos tipos de epilepsia
El caso de la niña norteamericana Charlotte Figi, de 6 años, que sufre un tipo raro de epilepsia, se ha conocido en todo el mundo. En el 2013, cuando todavía el cannabis medicinal era usado de manera muy experimental, los padres de Charlotte tomaron la valiente decisión de darle aceite de CBD. Este controvertido tratamiento resultó disminuyendo las crisis convulsivas de la niña de 300 a la semana a 2 o 3 en un mes.
Este y muchos casos alrededor del mundo han confirmado que el CBD es un componente efectivo para casos de epilepsia en los que los tratamientos convencionales no dan resultado.
Aún se está estudiando exactamente como es el mecanismo de acción por el cual se logran estos efectos, y aunque aún no se ha logrado la descripción puntual de este mecanismo, en ninguno de los estudios hasta ahora se han reportado efectos secundarios.
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8. Se puede tratar el dolor crónico con medicamentos de cannabis
¿Alguna vez has pensado cómo sería tu vida si tuvieras que lidiar con el dolor todos los días? Bueno, debes saber que este es un desafío que miles de personas en todo el mundo realmente tienen que enfrentar. Si ese es tu caso, es importante que sepas que el cannabis puede ser una opción.
Tanto THC como CBD son conocidos por sus propiedades analgésicas, incluso muchos medicamentos combinan los dos componentes en el tratamiento del dolor crónico. Cabe anotar que dependiendo de la fuente causal del dolor, dependerá el medicamento que necesitas para manejarlo.
El dolor crónico es aquel que persiste por más de tres meses y puede ser resistente a los tratamientos convencionales. Además, es altamente incapacitante.
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9. Todavía hay mucho que descubrir sobre el potencial terapéutico del cannabis
Muchos problemas de salud ya están siendo tratados con medicamentos a base de cannabis. Otros, ciertamente, también serán beneficiados por el avance de la investigación científica en torno a esta planta.
El cannabis también ha mostrado potencial en el control de los síntomas de otras variadas enfermedades como la artritis, dermatitis, glaucoma y asma, además de ser beneficioso en el combate a los trastornos del sueño, como el insomnio.
Es un amplio campo de investigación en el cual hasta ahora estamos empezando a incursionar. En la medida en la que se genere mayor investigación, se va a lograr encontrar solución a otros problemas de salud, posiblemente no solo como coadyuvante junto con otras terapéuticas, sino como medicamento de primera línea de manejo.
Es necesario también ampliar nuestro conocimiento acerca de los posibles efectos secundarios que se descubran en el camino, las contraindicaciones, si es que estas llegasen a existir, y las interacciones que podemos encontrar con otros medicamentos.
10. Muchos países han legalizado el cannabis medicinal
El uso medicinal del cannabis es legal en por lo menos 21 países, entre estos está los Estados Unidos, donde la legislación varía según el estado, y Colombia.
En estos países, los procesos legales relacionados con la legalización del uso medicinal se han desarrollado de forma independiente a la polémica legalización de su uso recreativo.
En este artículo, resumimos las 10 principales razones por las que deberías dejar a un lado posibles prejuicios y empezar a informarte sobre el cannabis medicinal.
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Revisado por:
Dra. Nohora Andrea Gil Castro
Medico Cirujano – Fundación Universitaria Juan N. Corpas – Colombia
Diplomado en Holontologia con énfasis en Homeopatía – ISES
RM: CMC2016-17461
Fuentes
Maconha como tratamento medicinal [Saúde, 2016]
Maconha medicinal [UOL Notícias]
Conheça a História da Cannabis Medicinal [
Associação Brasileira de Pacientes de Cannabis Medicinal]
Maconha: o que é, efeitos e tudo sobre [Minhavida]
Cannabis and Cancer [Leafly]